"Nunca hubo gloria sin desafío"
Martí Perarnau
Sábado por la tarde en ImmoBan. Para desconectar un rato del trabajo escribo un artículo. Bueno, mejor dicho, estoy pensando en el trabajo y para aclarar algunas de mis dudas decido escribir un artículo. Tengo la costumbre (buena o mala, depende como se mire) de darle muchas vueltas a la cosas que me interesan y con las que me comprometo. Creo que mis dudas no son por inseguridad ni por miedo; son, más bien, la búsqueda (imposible) de la perfección.
Llevo unos días dándole vueltas a dos asuntos. Uno es cómo podemos mejorar nuestro trabajo con los compradores de Calafell. Qué podemos hacer para que algo tan complejo y sutil como es la compra de una vivienda se convierta en algo sencillo y agradable para los clientes que confían en nuestro equipo. Qué cosas de valor podemos hacer por ellos; qué cosas podemos hacer que ellos solos no podrían hacer. El otro asunto que me desvela es la organización de AIC15, la Jornada Inmobiliaria de Calafell que queremos celebrar de nuevo en marzo de 2015. Paralelamente a mis cavilaciones estoy leyendo un libro fascinante. Herr Pep de Martí Perarnau. El entrenador de fútbol Pep Guardiola siempre ha sido para mi un referente por la forma, apasionada y obsesiva, con la que vive su profesión.
Pep le da vueltas y vueltas a cualquier asunto del juego antes de tomar la decisión final y siento cierta identificación con él. "La mente de Guardiola se parece a la del ajedrecista que valora y sopesa todos los movimientos, propios y del rival, para anticipar mentalmente el desarrollo de la partida. Juegue contra quien juegue, la preparación será idéntica: no habrá un segundo de descanso hasta que desmenuce y evalúe todas las opciones. Y al terminar, volverá de nuevo sobre ellas. Es lo que Manel Estiarte, su brazo derecho en el Barça y en el Bayern, denomina 'la ley de los 32 minutos', en referencia a su dificultad para conseguir que Pep desconecte del fútbol. Estiarte emplea todos los recursos a su alcance para contener de vez en cuando la obsesión del entrenador y obligarle a que se distraiga, pero sabe por experiencia que la distracción no dura más de media hora: 'Te lo llevas a comer a un restaurante para que se olvide del fútbol, pero a los 32 minutos ya ves que vuelve a las andadas. Los ojos se le van al techo, hace que sí con la cabeza, que te escucha, pero ya no te mira, ya está pensando otra vez en el lateral izquierdo del equipo contrario, en las coberturas del mediocentro, en los apoyos al extremo... ha pasado media hora y vuelve a su análisis interior', explica Estiarte". Párrafos como este son los que me fascinan del libro de Perarnau. Voy a seguir dándole vueltas al trabajo de ImmoBan con los compradores y a AIC15. Buen fin de semana!
Se llama pasión. Si algo te gusta, si te interesas y buscas soluciones a los problemas, y los encuentras y te dan resultado, es una especie de droga que se llama pasión. La creatividad es eso, encontrar soluciones a problemas, y es apasionante ver que dan resultado. Necesitamos pasión en nuestras vidas.
ResponderEliminarPocos resultados más satisfactorios que el reconocimiento y el agradecimiento de otros que se han beneficiado de alguna manera de tus soluciones. Como le oí decir a Serrat, "si todo esto sólo lo he hecho para que mis amigos me quieran..."
ResponderEliminar"Si todo esto solo lo he hecho para que mis CLIENTES y mis COLEGAS me quieran" :)
ResponderEliminarQué buenos comentarios!
Lo que de veras me parece admirable en este tipo de personas (y os incluyo en esta categoría, por ser rara avis en el sector inmobiliario... cada vez menos, eso sí) es, más allá de la pasión, la vehemencia con la que expresan sus ideas y la fuerza motriz que generan a su alrededor y que nos contagian.
ResponderEliminarEsto de la vehemencia ya me lo dicen mis clientes cuando les doy la tabarra. Muchas gracias por el comentario, Rebeca :)
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