Anoche tuve un sueño. Soñé que a un pueblecito de la costa catalana llegaba un numeroso grupo de agentes inmobiliarios. Rafa, Karol, Marian, Ángel, Amaia, Miguel, Montse, Carlos, Ernest, Ismael, Dani, Yolanda... y tantos otros de nombre memorable llenaron un teatro movidos por el cambio.
Allí les esperaba un maestro, de nombre Fernando, capaz de dibujar con palabras los resortes del cambio que se había producido en la profesión en los últimos años. Les habló de tecnología, de asociaciones, de formación y de la vida como cambio. Escuchaban atentos a Fernando cuando llegó con aire despistado un joven maestro pastelero de renombre internacional y les contó cómo construye en chocolate sus sueños. Mientras Oriol hablaba esos agentes imaginaban nuevas formas -más creativas- de trabajar.
Un señor de voz poderosa (nombrado, Secundino) apareció en la sala y entre risas y sencillas lecciones universales enseñó a los oyentes los secretos de la comunicación efectiva. La fiesta terminó con un mensaje inspirador sobre liderazgo y trabajo en equipo que les transmitió un tal Xesco, maestro en el arte de jugar con el corazón.
Cuando desperté, un viejo del lugar me contó que ese sueño se hará realidad, en Calafell, un 16 de marzo.
Accede al sueño: http://aicalafell.com/