O formarse para sobrevivir.
En los buenos tiempos (entiéndase, recientemente, el periodo 1998-2006) para ser un vendedor de inmuebles en España no era necesario tener ninguna formación. Exagerando, diría que solo hacía falta tener la dirección y las llaves de una vivienda para venderla.
Desde hace unos meses, que ya se empiezan a hacerse largos si no eternos, únicamente tienen cabida y futuro en el mercado inmobiliario nacional los profesionales. Los agentes inmobiliarios deben estar, pues, formados y preparados para enfrentarse con éxito a un complejo mercado inmobiliario que así lo requiere.
Mi compañero Ernest Soler y yo hemos tenido la suerte de asistir el 2 y 3 de octubre al curso de "Técnicas de negociación y cierre" impartido en Barcelona por el reconocido consultor de formación de la compañía Remax, Ignacio Castillo. El profesor Castillo ha estado, como siempre, brillante en la exposición de las cuestiones tratadas y abierto y generoso a compartir sus amplios conocimientos con los asistentes.
Estoy encantado y orgulloso de haber compartido vivencias con Arturo, Olga, Álvaro, Miguel, Marc, Ricardo, Didac, Joaquim, Ginés, Jesús, Francesc, Clara, Claudia, Montse, Pedro (perdonarme si me olvido de alguno de vosotros) y, como no, con Ignacio y os animo a todos a perseverar en la búsqueda del éxito y del reconocimiento profesional. Y también, sin duda, a poner en práctica las lecciones aprendidas.
Para acabar, dicen que el buen jugador de mus no es al que le salen buenas cartas y gana, sino el que gana con las malas.
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