Hace unos meses leí un libro estupendo que me recomendó mi maestro y amigo Fernando García Erviti; se trata de Fluir (una psicología de la felicidad) del autor, de nombre impronunciable, Mihaly Csikszentmihalyi. He estado releyendo el capítulo donde el autor resume el significado y las caracteristicas de la "personalidad autotélica" y me ha parecido interesante escribir unas líneas sobre este tema tan interesante para quien, entre otras cosas, necesite un asesor inmobiliario.
El término literalmente significa "una personalidad que tiene metas autónomas". Las reglas para desarrollar esta personalidad son simples y pueden resumirse del modo siguiente:
1. Definir las metas. Una de las diferencias básicas entre una pesonalidad autotélica y otra sin ella, es que la primera sabe que es ella quien tiene que elegir cualquier meta que persiga.
2. Sentirse inmerso en la actividad. Una personalidad autotélica se involucra profundamente en cualquier cosa que haga y, además, sabe equilibrar las oportunidades para la acción con las habilidades que uno posee.
3. Prestando atención a lo que está sucediendo. La concentración conduce a la involucración, que solo puede mantenerse con aportes constantes de atención. Dice el autor: "El padre que no escucha atentamente a su hijo malogra la interacción, el abogado que se distrae puede perder el caso y el cirujano cuya mente divaga puede perder al paciente. Tener una personalidad autotélica implica la capacidad para mantener la involucración".
4. Aprender a disfrutar de la experiencia inmediata. El resultado de tener una personalidad autotélica (o aprender a ponerse metas, a desarrollar habilidades, a saber como concentrarse y conseguir implicarse) es que uno puede conseguir disfrutar de la vida incluso cuando las circunstancias son complicadas.
Ponernos metas, implicarnos en la actividad, concentrarnos y disfrutar de lo que hacemos, ¡qué más se puede pedir!
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