"Una vez que algo es una pasión, hay motivación"
Michael Schumacher
*20 de noviembre de 2015.
Entra un señor nervioso por la puerta de ImmoBan y se dirige directamente a mi mesa y me dice: ¡Tengo un apartamento en el paseo marítimo de Calafell y quiero venderlo!
Pienso, bien, ese es mi trabajo, ayudar a vender. Lo miro, sonrío y le pregunto: ¿Cómo nos ha conocido? Y el hombre nervioso contesta: Te veo cada día andando como un loco con unos bastones por la playa y he pensado que si eres tan rápido vendiendo pisos como andando con los bastones, lo venderás enseguida.
Justo en esas fechas Francisco Linares de Expovivienda en Roquetas de Mar y Aguadulce (Almería) estaba haciendo un Stage Inmobiliario conmigo. A Francisco y a mi, al escucharle, nos entra un ataque de risa. Acompañamos a F.G. a ver el piso, le digo lo que puede valer, me da unas llaves y una copia del título de propiedad, redacto el contrato de exclusiva a mano, lo firmamos y en menos de treinta minutos volvemos a estar en ImmoBan con un encargo de trabajo. Mando a mis compañeros Laura y Vicenç (interiorista y fotógrafo, respectivamemte; además de agentes del comprador) a adecentar y a fotografiar el apartamento e iniciamos de inmediato la campaña de comercialización.
*29 de enero de 2016.
Salgo de dar el taller El poder de la exclusiva en Valencia y reviso las llamadas que tengo en el móvil. Una de ellas es de una agente de una inmobiliaria de AIC (la MLS local). Llamo a la agente y me dice que tiene una oferta por el apartamento del señor G. Le digo que voy a hablar con mi cliente. Cuelgo y llamo a F.G. Le empiezo a comentar la oferta y nervioso me dice: ¡Haz lo que te dé la gana! Vuelvo a partirme de risa. Aunque la oferta me parece interesante, espero unas horas, llamo a la otra agencia y le digo que mi cliente no acepta esa oferta, pero que sí aceptaría vender por X. La agente habla con su cliente y me dice que adelante. De nuevo llamo a F.G.para decirle que tenemos el apartamento vendido por un precio superior. Y me suelta: No me cuentes historias, cuando tenga que ir a firmar y a cobrar, ya me avisarás.
Pienso, F.G. es incorregible pero cómo mola su confianza.
Hoy hemos ido a la Notaría a firmar la venta y, al terminar, me ha dado las gracias y la mano y ha salido zumbando.
No hay comentarios:
Publicar un comentario